www.sendaantigua.com

miércoles, 16 de marzo de 2011

¿Era judío Cristobal Colón?


                Cristobal Colón era Judío

En octubre, cientos de miles de personas se reunieron en las calles de la ciudad de Manhatan, como hacen cada año, para celebrar el legado de Cristóbal Colón, el descubrimiento del nuevo mundo. Con pompa y ceremonia, las masas llenaron la Quinta Avenida, llenándola de disfraces de vivos colores y música, como parte del desfile del Día de Colón, que se realiza en Nueva York desde 1929. Políticos y dignatarios locales participaron del evento, así como gente que vino de las afueras de la zona metropolitana, en lo que se ha convertido en un homenaje popular a la herencia ítalo-americana del país.
Ahora, sin embargo, se han publicado nuevas evidencias, las cuales señalan que han estado celebrando un evento errado. Colón, parece ser, no era ni italiano, ni español, ni portugués. Era – aunque no lo crea – judío. Esta, por lo menos, es la conclusión a la que llegó Estelle Irizarry, profesora en la Universidad Georgetown de Washington, quien estudió la gramática de Colón, el lenguaje y la sintaxis de más de 100 cartas, diarios personales y documentos que él escribió.

Inconsistencias en su deletrear junto con errores gramaticales, llevaron a Irizarry a deducir que catalán, no español, era la lengua nativa del Gran Navegador y que llegó desde Aragón, en el noreste de España. Pero, al mismo tiempo, ella descubrió que su estilo y su puntuación correspondía al Ladino, el dialecto de los judíos españoles. Eso, junto con otros aspectos de sus escritos, la llevaron a concluir que él era judío o converso (un judío que se convirtió al cristianismo) que buscaba ocultar su identidad. Si Izarry tiene razón, entonces sería más correcto referirse al hombre conocido con el Almirante del Océano como Jaim, mas que como Cristóbal, Colón.

ANTES DE que tome esto como una broma de buen ingenio, no sirve de nada que el misterio acerca de los orígenes de Colón haya sido durante mucho tiempo el tema de debate, e historiadores continúen desacordando acerca de los hechos más básicos de su vida. Colón mismo era famoso por ocultar su herencia, respondiéndole a todo aquel que preguntaba, “vine de nada”. En consecuencia, muchos investigadores han sugerido que era el hijo de un tejedor genovés, el hijo ilegítimo de un duque portugués o incluso un miembro de una familia de la nobleza griega. Pero varios eruditos españoles, tales como José Erugo, C. García de la Riega, Otero Sánchez y Nicolás Días Pérez, han dicho que Colón era marrano, término peyorativo para aquellos judíos que fueron convertidos por la fuerza al judaísmo.

Partidarios adicionales de esta teoría incluyen al caza nazis Simón Weisenthal, quien en su libro "Operación Nuevo Mundo" argumentaba que el viaje de Colón en 1492 fue motivado por el deseo de encontrar una tierra para los judíos luego de la expulsión de España. Diga lo que quiera, pero no puede negar que la evidencia es intrigante. Colón adopto dicho apellido, el cual era muy común entre los judíos de esa época. Cuando murió, dejó parte de su herencia a un judío converso de Lisboa, y su hijo Fernando escribió en su biografía que todos sus antepasados “pertenecían a la nobleza de Jerusalén”.

La partida de la travesía de Colón coincidió con el ultimátum que le fue dado a los judíos españoles para dejar el país para siempre, y judíos y conversos fueron los mayores financiadores de su viaje. Como dice el historiador Cecil Roth en su libro La contribución Judía a la Civilización, “el hecho de que el gran explorador tenía una afición por la sociedad judía y que los judíos estaban profundamente relacionados con su emprendimiento desde el comienzo, es algo innegable”. Esto incluía a Luis de Santangel, descendiente de judíos conversos que proveyeron la mayor parte de los fondos del viaje, así como Don Isaac Abravanel, el famoso rabino y financiador de la corona real.  En forma interesante, Roth observa que cuando Colón llega a América, “la tierra fue divisada en un principio por Rodrigo de Triana, el marinero marrano; y Luis de Torres, el intérprete, quien fue bautizado tan solo unos días antes de salir a la expedición, fue el primer Europeo en pisar el Nuevo Mundo”.

AHORA, USTED debe preguntarse: ¿acaso todo esto tiene alguna importancia? ¿a alguien le importa que Colón era judío? Creo que la respuesta es definitivamente que si. Esto es más que un hecho de curiosidad histórica. Es un motivo de orgullo, y otro ejemplo de cómo los judíos han ayudado al mundo, a lo largo de la historia, a convertirse en un mejor lugar. A pesar de que Colón nunca descubrió el pasaje hacia Asia que estaba buscando, descubrió un nuevo mundo y expandió los límites de pensamiento de la humanidad así como la comprensión de la misma respecto al globo terráqueo. Así también, la colonización que vino posteriormente al lugar, finalmente ha traído el nacimiento de América, con todo lo bueno que ésta ha logrado.

Por supuesto, nunca sabremos con total seguridad si Colón fue un judío secreto. Pero hay suficientes evidencias para apoyar dicha teoría, y para justificar que era uno de “nosotros”. Así que en lugar de dejarle a los españoles, italianos u otros el derecho a dicha celebridad, creo que es el momento de que Israel y el mundo judío lo hagan. Tributos y exhibiciones en museos deberían ser organizados como parte del esfuerzo de resaltar las raíces judías de Colón. Porque en un momento en que el antisemitismo en América está creciendo, y Washington presiona a Israel para realizar peligrosas concesiones, sería lindo recordarles la deuda que tienen con uno de aquellos que ellos difaman.



1 comentario:

  1. Para mí umilde opinión yo creo que la mayoría de emigrantes del viejo mundo eran judios y que el mismo cristobal colon tanbien lo hera

    ResponderEliminar